La Salvación es tener a Jesús como Señor y eso se logra sólo con personas que respondan a la encomienda de “Iglesia Enviada” con métodos que sirvan hoy. Hablamos sobre lo que significa el hacer a Jesús nuestro Señor, y de cómo funciona la salvación por medio de la fe. Luego vemos el clamor de Pablo con cuatro preguntas retóricas instándonos a salir a compartir el Evangelio.

Ahora bien, ¿cómo invocarán a aquel en quien no han creído? ¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído? ¿Y cómo oirán si no hay quien les predique? ¿Y quién predicará sin ser enviado? Así está escrito: «¡Qué hermoso es recibir al mensajero que trae buenas nuevas!»

Romanos 10:14-15